La canción del olvido
que quedo en mi recuerdo,
fue como la luz de un barco
como una noche de encuentros.
Ahora escucho a través
del cristal de mi terrario,
que no se si volveré
a caminar por el barro.
Me estrizteco al escuchar
tu guitarra de corsario,
con la que defiendes el mundo
y es tu fúsil mas preciado.
Mañana estaré otra vez
en el mundo, en el templario,
espero que esta vez con mas suerte
para mi y también para mi sayo.